Aquí la transcripción de lo que expresa el comunicado:

"El día viernes 17 el intendente municipal se mostró en contra de que los funcionarios donemos parte de nuestras dietas para aliviar la situación desfavorable que muchos ciudadanos padecen a costa de la pandemia de Co-vid 19, al mismo tiempo que atacaba a los concejales de Cambiemos por nuestra actitud de estar a favor de realizar las donaciones.

Ante todo, más allá de lo particular de la situación, la realidad es que nosotros durante todo el año (y no dos meses como dice el intendente) destinamos nuestro sueldo a la ayuda de la sociedad. La política no es un medio de vida para nosotros sino una actividad destinada a procurar el bien común respetando siempre la voluntad y la confianza de todos los montehermoseños, dado que nosotros vivimos en base a nuestras competencias profesionales en el ámbito privado, situación que puede y ha sido en muchísimas ocasiones constatada por cualquier ciudadano que nos ha visto trabajar. La política es una actividad de servicio que nos hace responsables ante la ciudadanía, y no significa que estemos en una posición superior al resto ni que nos merezcamos su reverencia.

Para nosotros el destinar nuestras dietas para ayudar a la sociedad no es una “chicana barata” como irrespetuosamente dice el intendente sino la forma en la que nosotros entendemos y vivimos la política, especialmente en situaciones particulares como la que atravesamos, que ponen a prueba nuestra integridad, valores y capacidad de liderazgo.

El intendente dice que una donación del 20% de su dieta (lo que constituiría $36.000 pesos por mes en virtud de su sueldo de $180.000, como él dice uno de los más altos de Monte Hermoso) es un aporte nimio a la situación, pero la realidad es que tal aporte sería una gran ayuda para decenas de familias; el restante de su dieta que serían alrededor de $144.000 parece suficiente para sobrevivir durante estos tiempos difíciles.

La ayuda que nosotros prestamos no sólo a cuantas instituciones podemos sin ningún tipo de preferencia sino a los particulares que la solicitan para no pedirle a la municipalidad, sobre todo teniendo en cuenta que casi 2000 personas se mostraron en contra de esta administración es en función del lugar que ocupamos en la sociedad y no porque tengamos que “lavarnos las patas” como dice el intendente tan burdamente. Siempre nos hemos manejado con la mayor honestidad y transparencia por respeto a nuestro rol.

La negativa del intendente a donar parte de su dieta se basa también en la donación de $750.000 por día en ayuda a personas. Respecto a esto, nos parece importantísimo que se sepa a quien está destinada esta ayuda, si se realiza en forma de dinero o con mercadería y si así fuera a quien se le compra y a qué precio, sobre todo teniendo en cuenta que este dinero no proviene de la caridad de ningún funcionario sino de los aportes altísimos que realizan los contribuyentes y de fondos provinciales y nacionales. Nuestra preocupación viene dada porque durante los seis años anteriores no hemos recibido información sobre el destino de los fondos municipales destinados a ayuda a personas, situación que el intendente ha puesto de relieve en la última apertura de sesiones al decir que el presupuesto municipal anual de $750.000.000 podía de hecho llegar a los mil millones de pesos de los cuales tan solo 47 tienen un destino específico. La transparencia y honestidad cobra especial importancia en épocas como ésta y esperamos que el ejecutivo este a la altura de las circunstancias como intentamos estarlo nosotros desde nuestro lugar.

Otra cuestión que nos preocupa es la negativa del intendente a que sus funcionarios (y particularmente los concejales de su bloque) donen una parte de sus dietas, ya que no sólo está ignorando la voluntad popular que lo puso en el lugar en el que está (demostrada durante los recientes aplausos que se escuchan diariamente a las 21 hs.), sino que está atropellando principios como la separación de poderes y la libre determinación de las personas. Nos parece una lástima que después de décadas viviendo de la política, como el mismo intendente afirma con orgullo, no haya aprendido a respetar estas cuestiones tan importantes para la sociedad. Por otro lado, los ciudadanos siguen pagando las altísimas contribuciones que se les imponen aun cuando están impedidos de trabajar.

Al igual que él, nosotros también reivindicamos la política, pero no como un medio de crecimiento económico personal a costa del pueblo sino como na contribución de cualquier manera posible al bienestar general y entendemos que nuestros sueldos son un vehículo para ello."